Javier Caso Iglesias | Analista Político y Activista Social
Un buen número de personas progresistas de Extremadura, pertenecientes a importantes organizaciones sociales, sindicales y políticas, han contactado conmigo para preguntarme sobre el proyecto SUMA, LA GENTE PRIMERO; así sobre sus posibilidades de hacerse realidad en Extremadura.
Es conocido que participo en esta iniciativa que, junto a Izquierda Unida, impulsan más de 30 organizaciones políticas y sociales de ámbito estatal entre las que se encuentran varias Asambleas Populares del 15M, la Asociación Nacional de Desempleados (Adesorg), Convocatoria Cívica, Cooperación por la Renta Básica y el Reparto del Trabajo, Coordinadora de Plataformas en Defensa de las Personas Desempleadas (PDPD)-Adesorg, Frente Cívico, Izquierda Abierta, Izquierda Anticapitalista, Izquierda Republicana, Junt@s Podemos, Plataforma Contra la Impunidad del Franquismo, Primavera Andaluza, Sindicato de Estudiantes, Unidad Cívica por la República y un largo ecétera.
Desde LA IZQUIERDA también participamos a través de las organizaciones que conforman este espacio de cooperación política: Ezker Batua-Berdeak EB-B, Iniciativa Socialista de Izquierdas ISI-CS-UISA, Nova Esquerda Galega NEG, Plataforma Ciudadana YA PCYA, Colectivo Red Verde de Extremadura CRV-Ex, Convergencia por Extremadura CEx, Fuerza Republicana FR, ...
Mi idea sobre el proyecto SUMA en Extremadura es que se trata de una oportunidad histórica para empezar a practicar una política de amplios consensos y acuerdos que posibiliten crear una zona política abierta, plural y amable, en la que en pie de igualdad y de forma horizontal, se relacionen y convivan todas las tradiciones, familias y culturas de la izquierda transformadora y alternativa.
El que esto sea así va a estar mucho en función del comportamiento que todos los actores políticos, sociales y sindicales llamados a implicarse en esta iniciativa adopten en la región. En este sentido se debe de tomar ejemplo del trabajo serio, riguroso y responsable que se está llevando a cabo por los diferentes Grupos de Trabajo y Coordinación de ámbito federal del proyecto SUMA; los cuales están trabajando sobre la base de lograr amplios acuerdos y consensos.
En este momento que nos toca vivir hemos de evitar cualquier tipo de división de la izquierda transformadora, pues esas divisiones solo nos conducen a perder derechos y conquistas sociales como estamos observando en la dura realidad que padecemos; dura realidad que en buena parte es consecuencia de esa atomización consecuencia de la beligerancia y confrontación de las izquierdas alternativas.
Una de las razones de esta atomización producto de la beligerancia y la confrontación es el haber dado de lado a la política de amplios consensos y haberla sustituido por la praxis política de la vota-botacracia (poliarquía) y que no es otra cosa que utilizar el mecanismo del voto para botar/excluir (http://goo.gl/5k5lLV).
Si la izquierda transformadora y alternativa quiere/queremos de verdad ser una alternativa de gobierno y de poder hemos de empezar por respetarnos, por respetar la diversidad que somos y conseguir una incluyente unidad de esa diversidad.
Por eso lo importante es definir en SUMA un modelo diferente de relación y de resolución de los desencuentros que se produzcan. Un modelo de relación que se aleje de la poliarquía (utilización del mecanismo del voto para excluir) y camine hacia la democracia y el consenso. Un modelo de relación que entienda que la mejor manera de resolver cualquier tipo de discrepancias es sentarnos todos y de una forma cordial y amable tratar, de forma consensuada y sin excluir a nadie llegar a acuerdos satisfactorios para todas las partes en los que no haya vencedores y vencidos; acuerdos que nos hagan eficaces políticamente a la hora de combatir las políticas de derechas que padecemos.
En este momento histórico todos/as somos necesarios e incluso imprescindibles. Necesitamos que todos nuestros efectivos trabajen con una misma hoja de ruta consensuada y sin estridencias. Para ello es necesario que nos sentemos con la voluntad de llegar a acuerdos amplios y generosos que satisfagan a todas las partes sin que nadie tenga que renunciar a ser parte del proyecto y que sus postulados se tengan en cuenta en el mismo.
En este momento histórico necesitamos muchos facilitadores/mediadores que posibiliten un encuentro sosegado, cordial, amable e integrador entre las organizaciones de izquierdas con litigios en Extremadura. Todas las organizaciones políticas que han tenido desavenencias entre ellas deben de hacer todo lo posible por mostrar una voluntad inequívoca para solventarlas y llegar a acuerdos que refuercen esa unidad sin fisuras que necesitamos frente a las políticas regresivas que el bipartidismo aplica al servicio de la Troika y de los mercados financieros-especulativos.
La mejor manera de comenzar el proyecto SUMA, LA GENTE PRIMERO, en Extremadura sería de esta manera; esto es, resolviendo previamente las desavenencias que existan a través de un proceso de diálogo cordial y amable entre las partes que, entre ellas, mantengan rencillas del pasado.
Por mi parte me ofrezco, en este sentido, para mediar en todo lo posible.
Como siempre digo estas son mis ideas que dejo a vuestro mejor criterio.
Ánimo pues y adelante, juntos somos más.
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